Ansiedad de influencia

Introducción

Muchas personas buscan que alguien les ayude a pensar,
ansían un consejo, piden sabiduría práctica, conocer mejor a los demás,
los nuestros a menudo se ofuscan por mostrarnos su verdad
conseguir la felicidad del otro es su quimera
influir en alguien
cuando nada parece tener salida

ser esclavo del tiempo
atrapados para tener que aparentar
contentamiento con el absurdo
impávidos las ciudades se deterioran.
Lo que fue antes ya es.

Todo se pierde, ¿a causa de quienes?
—De nadie,
más bien se trata de una excesiva confianza en el hoy,
conjunta con una ingenua fe en el futuro,
la fe de la noche,
no te añade,
amor fati

Ser feliz, nada más barato hay siempre
por lo que,
lee  todo cuanto puedas,
imposible
la mayoría no lee
veo los libros sin subrayados y sin marginalia
porque pensar después de leer tal vez sea lo más difícil,
ir a la acción para fracasar
el libro, tan esbelto, lo sostengo con mis manos,
sus impresores los fabrican, al diablo los demás.

Libros, queridos, ustedes son los acompañantes silenciosos de mi nihilismo.
Libros, los sostengo contenta, en el acto solitario y pesado,
dichosa carga, trabajemos, olvidando el tedio, la saña,
que gran placer compartido con tantos, junto a la mesa de noche espera un libro cerrado.
Nocturnal.
Antes de acostarse, nunca al levantarse,
pues al alba, la nada.

Ha sucedido,
que la realidad y la razón que de golpe nos devuelven una verdad,
que nada somos
aunque el cielo no tenga piedad
y la inventamos para malgastar
una ley, claro que sí,
más que la de confiar
dejarme influir por el vacío, nadar entre las aguas heladas, como pez trágico,
ser alimento, el sargazo que mantiene el equilibrio,
arribar a la orilla, ensuciando la playa alba
agarro de la orilla coral y conchas petrificándose

Nutriré a mis vasallos.
Hombres, yo soy su sirviente

Primera soledad libresca

El futuro falso del libro

De niña nunca la llevó a esa
feria situada en el dormitorio
de la metrópoli regiomontana
ella creció, y un día fue sola
bueno, acompañada, aunque sola
contempló todos los libros expuestos
desfilando la cultura libresca
no sofisticada como Europa.
Europa aún no aparecía,
sin mapamundis enciclopédicos.
En la feria del libro venden mapas
que mejor instrumento para viaje
que un libro tenga suaves solapas,
astrolabio para mirar personas,
catalejo para advertir piensos,
y un chicote para ser oído
y el libro entero ofrecerá
la soledad del olvido de los vivos